El objetivo absoluto de un deportista de élite es optimizar permanentemente su rendimiento. Para lograrlo, se cuida hasta el más mínimo detalle; un factor decisivo es una nutrición adecuada.
Su palmarés es impresionante: Jens Roth se ha proclamado campeón alemán de triatlón cross 5 veces consecutivas. En 2015, también fue subcampeón de Europa de la categoría profesional.
Se metió en el triatlón más bien por casualidad. “Fui nadador durante años y también competí en la selección juvenil de Alemania. Y entonces, a los 20 años, me encontré en una encrucijada: ya no podía nadar tanto. Para llegar a lo más alto, hay que nadar entre 10 y 12 veces a la semana durante 2 horas. Así que elegí un deporte al que pudiera acceder saliendo de casa. Vengo de una pequeña ciudad con bosques y mucha naturaleza. Era lo que había que hacer. Correr y montar en bicicleta siempre ha funcionado”.
Al principio, Jens compaginaba el deporte con su trabajo diario como ingeniero eléctrico. Luego, en 2014, decidió hacerse profesional. Gracias a este deporte, ha estado en algunos de los lugares más bellos del mundo; ha competido en Australia, China, América y Hawai. Su lema: “Tienes que amar lo que haces y sentir pasión por ello; de lo contrario, no saldrías a la puerta todos los días y harías que algo sucediera, ¡incluso cuando hace mal tiempo!”.
Un día de entrenamiento clásico para él empieza con una carrera informal por la mañana, normalmente sobrio, para estimular el metabolismo de las grasas. Luego, a lo largo del día, un paseo en bicicleta de 3 a 4 horas. A veces con retos específicos, como intervalos. Y por la tarde, normalmente con su equipo, una sesión de natación de 1,5 a 2 horas.
Jens intenta optimizar su rendimiento, como cualquier otro deportista de competición. Explica cómo lo consiguió complementando su dieta:
“Hace algún tiempo, participé en una prueba con otros 13 atletas para mejorar mi rendimiento en ciclismo. Tomamos FitLine Activize Oxyplus y dos cápsulas de FitLine Munogen cada mañana durante más de un mes y también antes de las sesiones de entrenamiento importantes.
Después de ese tiempo, se repitió la comprobación de la forma física en el ergómetro, y quedé tan contento con los datos de mi rendimiento que me quedé con el ritmo para mí e incorporé Activize y Munogen a mi rutina diaria. Para mi próximo gran objetivo: ¡el Ironman!”.